«Willy Oddó, el exilio en la voz”, es un espectáculo lleno de memoria y poesía que tendrá cinco funciones en GAM durante diciembre. Esta performance de Ismael Oddó es una instalación de artes visuales, una obra de teatro y un concierto, todo a la vez. Fue concebida como un viaje a través de su vida marcada por el exilio de sus padres, la llegada a Chile, su doble nacionalidad y la necesidad de compartir una reflexión acerca de la memoria y los derechos humanos.
Ismael junto a un equipo multidisciplinario, narra y canta su experiencia personal que está totalmente enredada a la historia de Chile: su padre Guillermo “Willy” Oddó (1943-1991), músico fundamental del grupo Quilapayún, vivió el exilio. Desde esa perspectiva, el trabajo aborda temas como el desarraigo forzoso de la patria y de la familia, la muerte de los amados, la ausencia, las esperanzas, la convicción de un país que pudo ser otro, la historia truncada de un sueño de justicia.
La historia personal se convierte en un relato colectivo y universal, que su protagonista invita a mirar desde la óptica de esta experiencia-país y sus huellas, para redescubrir con atención la actualidad.
“Este proyecto reúne varias disciplinas artísticas que son unidas por la memoria. La memoria alrededor de mi padre, la de mi familia y la experiencia del exilio. Voy relatando esta historia de manera cantada, como un actor que actúa su propia obra, que cuenta su propia historia”, comenta su creador Ismael Oddó.
Con una escenografía habitada por tres árboles, donde cuelgan fotografías, cartas y dibujos, conviven maletas con dioramas que muestran escenas que el cantante logró materializar desde su memoria, como la salida forzada del aeropuerto, el departamento donde vivió de niño en Francia y el regreso a un Chile que él imaginaba de otra manera.
“Es muy probable que yo no estaría hablando de memoria si a mi padre no lo hubieran asesinado hace 30 años. Nunca supe cuál fue la razón profunda de que lo hubiesen matado al regreso de su exilio. Él cantaba tangos, sambas argentinas, era el alma de la fiesta, muy cariñoso y carismático. Recordar significa ‘volver a pasar por el corazón’, y ese ejercicio es precisamente vital para hacer este homenaje a la vida”, concluye Oddó.
Idea original y conducción: Ismael Oddó Méndez | Dirección: Martín Erazo | Curatoría Visual: Máximo Corvalán | Diseño de Espacio: Eduardo Jiménez | Iluminación: Julio Escobar – Jaime Salamanca | Sonido: Jorge Fortune, Simón Ibarra | Visuales: Martín Erazo, Camilo Escobar | Gestión y producción: Maca Simonetti | Financia: FONDART Convocatoria 2018 | Colaboran: Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, GAM, Corporación Cultural de Recoleta, Casa Museo Michoacán de Los Guindos y Fundación Cultural Lo Prado.
1 al 15 de diciembre
Do 1 — 12 horas. Sá y Do — 18.30 h.
Sala N2.
$2.500 precio único.
Fotos: Camilo Escobar