La recepción de las obras se realizó de forma extraordinaria y por primera vez de manera digital, por lo que el jurado debió realizar la selección en base a la revisión de fotografías y videos. Ahora, los 32 artistas seleccionados tienen plazo hasta el 15 de noviembre para enviar la pieza física.
«Quiero agradecer a los 200 jóvenes de todo el país que enviaron obras a esta nueva versión del Concurso Nacional de Arte Joven. Estamos muy contentos por la masiva respuesta que tuvimos este año. A pesar de la pandemia, pudimos desarrollar el certamen y quiero agradecer al jurado por su labor y también por su compromiso, por haber dedicado mucho tiempo y haber trabajado con mucho rigor para seleccionar las obras finalistas», manifiesta el director de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Valparaíso, David Carrillo.
Rafael Torres, director del concurso, explica que «sin duda el estallido social y la crisis sanitaria están presente en las obras seleccionadas por el jurado del concurso, demostrando como siempre lo contingente del certamen. Fue una tarea ardua de los jurados, evaluar entre tantas obras y tan diversas, pero el resultado me deja muy conforme».
Marcela Kupfer, directora del diario La Estrella y jurado del certamen, expresa que “fue una tarea bastante ardua, pues llegaron muchas obras al concurso y el hacer la selección en forma remota, sin tenerlas a la vista, nos obligó a ser mucho más exhaustivos”.
“La selección del concurso se realizó de forma muy proactiva y profesional, con gran compromiso de parte del jurado y organizadores y, lo que es mejor, logrando mantener la continuidad de un certamen que ya tiene más de cuatro décadas de trayectoria”, agrega.
Sobre las temáticas presentadas, la jurado añade que “está muy presente el estallido social, el feminismo, los temas ambientales y los pueblos originarios, pero también hay una clara exploración hacia inspiraciones diversas, desde lo más íntimo a lo conceptual”.
“La gran convocatoria que tuvo el concurso este año tan difícil en distintos ámbitos sirvió también para enfrentarnos a un amplio panorama de técnicas y disciplinas. La pintura sigue ocupando un lugar predominante pero, como sucede especialmente entre los jóvenes creadores, hay una exploración hacia otras formas de expresión y materialidades, como los textiles o los collages”, añade.
Andrés Vio, artista visual, académico y jurado, detalla que “esta nueva versión ha sido especial, porque a pesar de las circunstancias se ha podido realizar de igual manera, lo cual es valioso y demuestra el compromiso de la UV con el certamen y la cultura, alentando a los artistas jóvenes, porque incluso el evento tiene un beneficio económico”. “Es valorable el ímpetu, fortaleza y resistencia del concurso. En cuanto a las temáticas, tuve la oportunidad de ver una gran cantidad de obras y me pareció bastante mezclado, con piezas de grabado, escultura y pintura, entre otros”, asegura.
Conforma el jurado también la artista Mariana Najmanovich, ganadora del certamen en 2018.
Los concursantes provienen de todo Chile, desde Arica hasta Osorno, siendo la gran mayoría de Santiago, Valparaíso y Viña del Mar. Destaca la presencia de un contingente importante de concursantes de la Región del Biobío.
El concurso entrega el Premio de Honor Universidad de Valparaíso, de adquisición, consistente en medalla, diploma y cuatro millones de pesos. El ganador podrá realizar una exposición individual en la sala El Farol, al año siguiente.
También considera el Premio de Honor Litoral, entregado por el Banco de Chile, de adquisición, el cual consiste en diploma y tres millones de pesos, y dos distinciones especiales que entregan diploma y quinientos mil pesos, cada una. El jurado, además, distinguirá con menciones honrosas a las obras que destaquen, no obstante su técnica.