Luis Felipe Bañados, es el dueño del restaurante “Los Hornitos” de Curacaví y el año 2020 decidió implementar el proyecto de vender sus productos empaquetados al vacío en las ciudades de Santiago y Viña del Mar.
El restaurante “Los Hornitos” de Curacaví
Partió en la capital, pero a poco andar, reparó en la necesidad de implementar una campaña comunicacional para hacer más efectiva su venta. De ahí, surgió la idea de crear una página web, plataforma que le permitió una mejor distribución de sus productos en Santiago.
“Partimos muy precariamente. Yo mismo desarrollé un sitio web con una plataforma básica, donde había plantillas para subir los productos con fotos y poder vender. Lamentablemente esas plantillas requieren un grado de programación que yo no sabía hacer y eso hacía que nuestra página se viera muy poco profesional, sumado a que tampoco teníamos fotos que generaran un plus al producto ante el consumidor”, explica Luis Felipe Bañados.
Beneficiario PAR
Desde 2020 vende productos empaquetados al vacío en Santiago y Viña del Mar..
Este empresario gastronómico, forma parte de los beneficiarios y beneficiarias del Programa de Apoyo a la Reactivación PAR IMPULSA de Corfo Metropolitano y que gracias al subsidio entregado logró la contratación de un servicio que le permitió mejorar el diseño de su plataforma digital y contar con una estrategia de marketing para la venta y comercialización de sus productos que se pueden ver en la página www.hornitoscuracavi.cl
“El proceso fue bastante expedito. Sí hay que respaldar bastante información y que lo que se va a hacer se cumpla. Hay que ser bien ordenado desde el principio. Hay que atreverse porque son recursos que están disponibles y que, en definitiva, son una opción hoy en día tras lo complicado que están todos los escenarios, sobre todo para actividades que no están acostumbradas a la venta online”, precisa el dueño del restaurante.
La época de pandemia obligó a todos los empresarios y/o emprendedores del sector turismo a cerrar sus puertas en marzo del 2020, lo que ocasionó que sus ventas bajaran notoriamente, pero a través del PAR Impulsa muchos pudieron continuar planificando sus proyectos y reinventarse para incluir nuevas metodologías que los ayudaran a mantenerse en el mercado.
“No hay ningún negocio en cualquier área que pueda sobrevivir manteniendo costos y estando cerrados 7 u 8 meses, es imposible sobrevivir sin flujos y pagando los gastos fijos y en algunos casos arriendos y otras necesidades, así que el PAR fue de gran ayuda para poder reinventarnos y para tener una opción de venta”, agrega este empresario
