“Seguimos sin ver la luz al final del túnel”. De esta forma tomaron en la industria del turismo el anuncio realizado por la Dirección de Fronteras de reabrir, a partir del 1 de mayo, todos los pasos fronterizos terrestres del país que aún se mantienen cerrados.
Y es que para la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), la medida no resuelve el tema de fondo que “nos mantiene en una especie de coma inducido, ya que para que esta industria se ponga de pie necesitamos funcionar de forma normal y que comiencen a llegar turistas extranjeros”, apuntó Ricardo Margulis, presidente del gremio.
El personero agregó que “ya no sabemos cómo transmitirles a las autoridades de que el término de la homologación de vacunas y el examen PCR a la llegada es la principal medida que necesitamos que el Gobierno adopte para salir de este coma, porque no nos alcanza ni con el turismo interno, ni con la apertura de los pasos ni con el plan de reactivación que acaba de anunciar el gobierno. No necesitamos sólo ayudas paliativas, sino que poder trabajar con normalidad”, enfatizó Margulis.
De hecho, el presidente de Fedetur recalcó que solicitaron una reunión urgente con la ministra de Salud, para abordar este tema y explicar los argumentos del sector, sin embargo, se nos derivó con el subsecretario de Salud Pública, autoridad que finalmente suspendió el encuentro que estaba programado para mediados de abril.
“Llevamos meses planteando esta urgencia, a través de reuniones con el Ejecutivo y también en la prensa, pero no han sido acogidas nuestras prioridades, y las actuales autoridades sanitarias ni siquiera nos han recibido”, afirmó Ricardo Margulis.
El representante gremial manifestó, además, que “revisando el plan de reactivación que presentó el Gobierno para ir en ayuda de los sectores más rezagados de la economía, como es el turismo, no vemos en ese plan un enfoque especial hacia nuestra industria, por lo que tampoco lo consideramos como un salvavida. Pero sobre todo, porque nuestro rubro junto con las ayudas económicas del Estado, requiere fundamentalmente volver a funcionar sin trabas, donde la recuperación del turismo receptivo es esencial para no terminar de hundirnos”.
“La apertura de fronteras terrestres no tendrá ningún impacto en el turismo receptivo, y las autoridades deben comprender que la eliminación de trabas tampoco significará una llegada masiva inmediata de visitantes internacionales, por lo que no hay que temer un posible colapso o riesgo en ese sentido, porque será un proceso paulatino”, indicó Margulis.
Finalmente, el presidente de Fedetur llamó al Gobierno a “sacar al turismo de este coma inducido” y que “liberen la actividad turística para volver a ser competitivos y poder generar los 105 mil empleos que aún no podemos recuperar”.