Tras seis meses de intenso trabajo, el proyecto de “Puesta en Valor del Patrimonio Cultural – Industrial del Biobío” que busca declarar al complejo ferroviario de San Rosendo como monumento histórico nacional presentó ante el Consejo de Monumentos Nacionales el documento que solicita la declaración de este inmueble como monumento histórico.
El proyecto, ejecutado por Fundación ProCultura y que recibió un financiamiento del Gobierno Regional a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) por $162.980.000, contó con el apoyo de la Municipalidad de San Rosendo encabezada por su alcalde Rabindranath Acuña y el Gobierno Regional del Biobío liderado por Rodrigo Díaz.
Precisamente, el gobernador regional, destacó que la iniciativa “no es solo un rescate o protección de un bien inmueble. El patrimonio, en su sentido amplio, apunta a reconocer nuestra identidad y reforzar nuestro sentido de pertenencia. En este sentido, es vital reconocer e integrar al siglo XXI el rol formativo de la industria ferroviaria que da lugar a lo que hoy es San Rosendo y a la región”.
En la elaboración del expediente que permite solicitar al Consejo de Monumentos Nacionales que declare al complejo ferroviario como Monumento Nacional se detalla la importancia del inmueble construido en 1929, fiel exponente de la arquitectura industrial ferroviaria de Chile, y que está compuesto por la casa de máquinas, la chimenea, la carbonera, el edificio de la maestranza, el edificio que alberga las oficinas administrativas y dos torres de agua.
Todas estas construcciones permitieron el desarrollo industrial del país y posicionaron a San Rosendo como una localidad de tránsito que permitía tanto el descanso de los pasajeros del tren, como la gestión comercial a través del traslado de mercancías de todo tipo a los diferentes puertos de la Región del Biobío.
El alcalde de San Rosendo, Rabindranath Acuña, aseguró que “el ferrocarril fue un elemento indispensable para el desarrollo del país y permitió que nuestra comuna se conformara como tal. Por lo mismo, es importante resguardarlo para que su valor y su historia no se pierdan”.
Complejo ferroviario, eje del desarrollo industrial
El inmueble compuesto por ocho construcciones fue fundamental para el desarrollo industrial y del transporte en el siglo XX ya que facilitó la conectividad entre los diversos puertos de la Región del Biobío gracias a su ubicación estratégica en un punto medio entre las zonas norte y sur.
El ferrocarril fue un elemento indispensable para la expansión económica, el dominio de tierras, la expansión territorial y la comercialización de productos. Lo anterior, sin contar los numerosos puestos de trabajo que ofreció tanto para los habitantes del sector como de otras regiones que llegaban a San Rosendo en busca de mejores oportunidades de vida.
El complejo ferroviario fue determinante para la configuración de la comuna. En torno al complejo se desarrollaron una serie de bienes y servicios tanto para los habitantes de la zona como para los visitantes: hoteles, bares, correo, locales comerciales, casas de empeño y librerías, solo por mencionar algunos.
Si bien el complejo ferroviario cesó sus funciones hace más de 40 años, su importancia histórica, sociocultural, arquitectónica y urbanística no ha desaparecido y debido al deterioro del inmueble producto del paso del tiempo, se hace indispensable poner en valor el lugar para que su legado no quede exclusivamente en la memoria colectiva de los habitantes más longevos del pueblo.
Víctor Rosales, representante de la Sociedad de Ferroviarios Jubilados y Montepiados y ex funcionario del Complejo Ferroviario, recordó que “en los años 50 y 60 San Rosendo fue la capital ferroviaria de Chile, todos los trenes del sur, del norte y del Ramal Concepción llegaban acá para el cambio de locomotoras, el recambio de personal de máquina y otras mantenciones. Los pasajeros estaban al menos media hora en la ciudad y podían tomar desayuno, almorzar, comprar tortillas y huevos duros a las señoritas de blanco” por lo mismo, aseguró que “si se concreta este proyecto, este sueño, sería un verdadero regalo el poder contar con este complejo como Monumento Histórico” porque se pone en valor el legado y el impacto de esta ciudad al desarrollo del país.
Conscientes de esto, diversas agrupaciones de la sociedad civil en conjunto con el municipio intentan salvaguardar el patrimonio ferroviario y ponerlo en valor. En ese contexto, Pablo Marinao, director de Ciudad y Vivienda Identitaria de Fundación ProCultura, explicó que “a pesar del actual estado de conservación, donde ciertos edificios presentan colapso estructural y desprendimientos de material, el complejo aún mantiene su integridad y autenticidad, sus edificaciones cuentan con gran potencial para ser restaurados y puestos en valor. La protección del complejo es una necesidad urgente, ya que se trata de un patrimonio industrial único y que está en condición de riesgo”.
Nelson Hernández Roldán, gerente general de EFE SUR, destacó que “el modo ferroviario se encuentra plenamente vigente en nuestra región. El servicio de trenes Corto Laja, que diariamente atiende a este sector, cuenta con trenes nuevos que incorporan alta tecnología. Hace unas semanas inauguramos un centro de entrenamiento para maquinistas y estamos dando un nuevo impulso al ferrocarril. Sin duda que este desarrollo ferroviario debe ir acompañado por el reconocimiento de nuestra historia. Nuestra región, en especial San Rosendo, es una parte relevante del ferrocarril en Chile. Realzarlo nos permite seguir desarrollando este sistema sin olvidar nuestro pasado y aprendiendo de éste.”
El camino para ser declarado monumento histórico
Para lograr que un inmueble sea declarado monumento histórico nacional, debe ser ingresada una solicitud junto con el expediente que contiene toda la información solicitada por el Consejo de Monumentos Nacionales para determinar si cuenta o no con los atributos patrimoniales suficientes.
En el caso del complejo ferroviario de San Rosendo, el expediente comenzó a elaborarse en enero 2022 y el proceso terminó en junio. Durante estos seis meses se realizaron una serie de análisis en diversas materias: histórico, urbano, arquitectónico, estructural, turístico y sociocultural, los que fueron complementados con visitas a terreno para la toma de medidas y la elaboración de planimetrías, la realización de entrevistas y participaciones comunitarias que permitieron una construcción colectiva del expediente.
La determinación de los valores y atributos del complejo se trabajó de manera colaborativa con la comunidad lo que constituye el alma del expediente puesto que son los mismos vecinos y vecinas quienes identifican y reconocen los elementos patrimoniales que caracterizan al inmueble y que, posteriormente, son los que definen si tiene o no valor patrimonial para ser declarado monumento histórico.
Además de la comunidad, una serie de organizaciones interesadas en apoyar la iniciativa colaboraron en la construcción del expediente a través de la participación activa en diversas instancias de trabajo que se mantendrán en el futuro. Estas organizaciones, agrupadas en la “Mesa de Patrimonio de San Rosendo”, son Ferrocarriles del Estado, Oficina Técnica Regional del Biobío Consejo de Monumentos Nacionales, Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo, Gobierno Regional del Biobío, Servicio Nacional de Turismo, Ministerio de Obras Públicas, Secretaría Comunal de Planificación de San Rosendo, Ilustre Municipalidad de San Rosendo, Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, Programa de Pequeñas Localidades de San Rosendo, Asociación de Jubilados ferroviarios y montepiados de San Rosendo y Fundación ProCultura.
El expediente ingresado al Consejo de Monumentos Nacionales ahora debe ser revisado y estudiado para que diversas comisiones realicen las observaciones que estimen para poder continuar con el proceso que, de ser favorable, terminará con la publicación en el Diario Oficial del decreto que declara al complejo ferroviario como monumento histórico y que dará inicio a su protección.
En ese sentido, Pablo Marinao aseguró que “esperamos que el Consejo de Monumentos Nacionales se pronuncie a fin de año y que ese pronunciamiento sea favorable para poder comenzar a gestionar los planes de mejora necesarios para restaurar y conservar el complejo ferroviario y potenciar el desarrollo socioeconómico de la comuna desde diversos ámbitos, todos vinculados al patrimonio cultural industrial”. Marinao agregó que “para esto, es indispensable la participación activa de la Mesa de Patrimonio de San Rosendo, así como la colaboración de la sociedad en su conjunto, todo con miras a devolver este valioso complejo ferroviario a los habitantes de nuestro país”.