No es fácil entender que con sólo respirar o tocar un árbol las personas pudiesen mejorar su estado de salud. Sin embargo existen estudios científicos que han podido determinar que los bosques y en especial algunos árboles, liberan fitoncidas (compuestos volátiles que protegen a los árboles de las bacterias, insectos y hongos), los cuales penetran a través de los pulmones y la piel de las personas, siendo capaces de matar e inhibir el desarrollo de microbios patógenos, y aumentar el número y actividad de células humanas defensivas que protegen de enfermedades infecciosas.
Además, participan activamente en el metabolismo y tienen un efecto positivo en el cerebro humano. También normalizan el ritmo cardíaco y la presión arterial; reducen los niveles de hormonas del estrés y los marcadores de ansiedad, ira, fatiga y confusión, mejorando notablemente la salud de las personas.
La Corporación Nacional Forestal (CONAF), en su búsqueda por modernizar la gestión y motivada por el compromiso de accesibilidad universal e inclusión social en las áreas silvestres protegidas del Estado (parques nacionales, reservas nacionales y monumentos naturales), que administra y gestiona, y entendiendo que su rol y el de su personal va más allá de la conservación de la diversidad biológica, como el bienestar humano, está incorporando esta práctica conocida como “Baños de Bosque” o Shinrin Yoku, el cual, desde el año 1982, Japón promueve como terapia de reconexión consciente con la naturaleza, por los beneficios que produce sobre la salud física, mental y emocional de las personas.
De este modo CONAF, a través de la Gerencia de Áreas Silvestres Protegidas, con el aporte en capacitación de la Fundación Bosques Para Ti y el Instituto de Baños de Bosques, con sede en Europa, puso en marcha esta iniciativa, que está dando sus primeros pasos a través de la capacitación de su personal (guardaparques) en estas áreas protegidas, procurando contar con la herramientas necesarias para entregar un servicio ecosistémico que contribuya a la salud de las personas en contacto con el medio natural.
El primer taller nacional de Baños de Bosque para guardaparques y profesionales de estas unidades se realizó en la Reserva Nacional Río Clarillo y contó con la presencia y colaboración de Claudio Vásquez, quien es el primer guía certificado en Terapias Forestales/Shinrin Yoku en Chile, y quien entregó algunos conocimientos y técnicas necesarias para poder guiar dicha experiencia con la naturaleza, y que permitirá a los guardaparques contar con más y mejores herramientas para poder hacerlo.
Así lo señaló Vásquez, quien resaltó que “los guardaparques han guiado siempre y con su experiencia y en forma autodidacta han podido conectar a las personas con el bosque. Sin embargo, con este taller podrán corregir algunas cosas y contar con herramientas y una metodología que permita realizar lo que venían haciendo de manera autodidacta de mejor manera”.
En este mismo sentido, el director ejecutivo de CONAF, José Manuel Rebolledo, junto con destacar que existen coordinaciones con el gabinete de la Primera Dama, Cecilia Morel, por el programa Adulto Mejor, con el Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), la Subsecretaría de Turismo y también el Colegio Médico, expresó que “tenemos un alto compromiso con este programa, porque es un gran aporte a mejorar la calidad de vida y la salud de muchas y muchos chilenos. Por lo mismo, seguiremos con estas capacitaciones y esperamos que en el corto tiempo en muchos de nuestros parques nacionales, reservas nacionales y monumentos naturales, nuestras y nuestros guardaparques puedan desarrollar junto a grupos de organizaciones sociales o familias, estos baños de bosque, donde el primer efecto es relajarnos y dejar atrás el estrés de las ciudades”.
Aún es prematuro iniciar la práctica de forma masiva en todas las áreas silvestres del país, puesto que se están realizando las capacitaciones para implementarlo a nivel nacional, sin embargo ya se han podido realizar algunas experiencias, destacando lo efectuado en el Monumento Natural Cerro Ñielol, en La Araucanía. Ahora se espera iniciar una fase piloto en la Reserva Nacional Río Clarillo, unidad que pretende convertirse en un modelo en la Región Metropolitana, por lo que significa estar cerca del centro poblado más grande y con los niveles de estrés más altos del país, considerando además, el aumento de enfermedades asociadas a la salud mental de la población. De hecho, Chile es el segundo país de la OCDE con mayor aumento en la tasa de suicidios durante los últimos 15 años. Y, según el Informe de este año de la Organización Mundial de la Salud, que mide la prevalencia de trastornos de salud mental en el mundo, señala que más de un millón de chilenos sufre de ansiedad y cerca de 850 mil padecen depresión.
Por todo lo anterior, no se puede desconocer el enorme valor de los bosques y las áreas verdes dentro de las ciudades. Y no sólo porque emiten oxígeno, sino también por el aporte y beneficios que entregan a la salud humana, como ser:
- Fortalece el sistema inmunológico
- Reduce la ansiedad y, la depresión
- Reduce el stress
- Mejora el estado de ánimo y salud
- Mejora el funcionamiento del sistema cardiovascular y reduce la presión arterial
- Incide en un menor sobrepeso y obesidad
- Ayuda a conciliar el sueño
- Contribuye a la salud mental y espiritual
- Contribuye a la cohesión y bienestar social
Shinrin Yoku o Baños de Bosques
Shinrin Yoku o Baños de Bosques o Baños de Naturaleza, es un medio para la reconexión sensorial a través de la naturaleza, busca dar solución a los problemas de salud psico-emocional de las personas, lo que genera un impacto positivo en la Sociedad, el rendimiento laboral, escolar y con ello económico en el sistema público de salud de Chile.