La capital de Santa Catarina, Florianópolis, es el quinto destino turístico nacional más visitado por los brasileños y el preferido de argentinos, uruguayos, paraguayos y chilenos. Las razones saltan a la vista: la isla cuenta con una naturaleza exuberante, playas paradisíacas, opciones para todos los presupuestos y mucha calidad de vida. A continuación, un checklist con lo mejor y lo no tan bueno de la “isla de la magia” en épocas de vacaciones y feriados.

A favor

Playas para elegir

Playa Joaquina, en Florianopolis.

Se dice que la capital catarinense tiene 42 playas, pero algunos aseguran que son muchas más. Lo interesante es la variedad, ya que hay opciones con olas grandes para practicar surf o kite surf, con olas moderadas o postales estilo Caribe; desiertas, superpobladas, con dunas o con mucho verde. Los visitantes también disponen de un amplio circuito de senderos urbanos que desembocan en playas, para quienes buscan una opción menos sedentaria. 

Entretenimiento a la carta

Con 800 mil habitantes y una economía muy activa, Florianópolis no decepciona a quienen buscan movida comercial y nocturna: centros comerciales, oferta gastronómica y vida nocturna serán parte del menú.

Deportes para expertos y principiantes

Florianópolis es un polo internacional de práctica de surf y de cultura playera; para principiantes también hay una amplia oferta de cursos para comenzar en la práctica de una disciplina en la cual el país es una potencia: cuatro de los seis últimos campeones mundiales de surf son nacidos y criados en Brasil. El stand up paddle y el sandboard también son ampliamente populares en la isla.

Altos y bajos

Pasarela Negro Querido, ideal para ver el Carnaval de Florianópolis.

De norte a sur, la isla de Florianópolis tiene unos 54 kilómetros de largo y cada uno de sus parajes tiene una característica distintiva. Por ejemplo la célebre playa de Jureré: no es la más linda, pero sí la más animada para quienes buscan fiesta durante sus vacaciones o en festividades como el carnaval.

Al norte y centro, paseos urbanos, opciones de alojamiento (como Canasvieiras o Lagoa da Conceição) y postales con linda vista. Al sur de la isla, donde a veces las aguas son heladas, una de las grandes atracciones es la Isla Campeche (hay que tomar un barquito para llegar), de aguas transparentes y ambiente tranquilísimo. Todo cerca, pero para el ritmo de cada viajero.

Carnaval a elección

La belleza en el Carnaval de Florianópolis.

Los desfiles de las escolas se desarrollan en la «Passarela Nego Quirido», a pocos metros de la céntrica Prainha: también hay blocos (comparsas) por toda la ciudad, que suelen complicar el flujo del tránsito. La oferta de fiestas carnavalescas en clubes de playa de la zona de Jureré es muy amplia y con opciones para todos los presupuestos. Pero quienes quieren descansar y refugiarse en la naturaleza disponen del sur de Florianópolis como oasis contra la agitación.

En contra

Embotellamientos

En temporada alta el tránsito para el acceso a las playas suele ser pesado: desde fines de diciembre a enero inclusive, se sugiere llegar temprano -a media mañana- y salir cerca de las 15 horas. En verano puede llover, pero las temperaturas suelen ser amenas, un calor soportable. Los meses de febrero, marzo y abril son los mejores, ya que el clima es agradable, el agua de las playas no está tan fría y la afluencia de turistas disminuye. Los recorridos invernales en Floripa son agradables, pero la playa puede ser un anatema para quienes odian el mar muy frío. En julio las temperaturas pueden ser menores a los 10 grados C.

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