Crear conciencia para la disminución de la velocidad en el tramo que la carretera austral (Ruta 7) cruza el Parque Nacional Cerro Castillo, al sur de Coyhaique, Región de Aysén, por la presencia de huemules, es el objetivo de los controles carreteros que comenzaron a realizar Carabineros junto a guardaparques y guardafauna de la Corporación Nacional Forestal (CONAF).
En total son 25 kilómetros de extensión que cruzan este parque nacional de la Región de Aysén, zona donde desde la primavera del año pasado hasta la fecha, se han registrado dos atropellos de huemules.
En este sector de la unidad, se detectó la presencia de unos 21 huemules, los que se suman a otras poblaciones identificadas en otras zonas del parque, estimándose una población de unos 100 ejemplares, una de las mayores a nivel nacional en un área protegida del Estado.
Por lo mismo, es que se volvieron a coordinar estos controles carreteros con Carabineros de la Subcomisaría de Balmaceda, a través de la capitana Francisca Torres, estableciéndose un programa de 24 controles para este año.
Uno de los aspectos que más resaltó la guardafauna de CONAF y médico veterinaria, Makarena Sáenz, quien participó en la actividad, es que “este fin de semana pudimos controlar a 46 vehículos, informando a más de 100 personas respecto de la presencia de huemules en la carretera y que disminuyendo la velocidad podrían tener la fortuna de verlos. Es importante mantener esta actividad, porque de esta forma incentivamos a que en estos 25 kilómetros se respete y se baje la velocidad de circulación, ya que la meta final es proteger la población de huemules de esta zona del parque nacional”.
Para el administrador de este parque nacional, Hernán Velásquez, es importante seguir efectuando esta labor a lo largo del año, ya que en ese tramo de 25 kilómetros, en los 104 patrullajes realizados en el sector durante el primer trimestre de este año, con un total de 5.877 kilómetros recorridos, se pudo identificar una población de 21 huemules, número mínimo mensual registrado asociado a la ruta que cruza el Parque Nacional Cerro Castillo, de los cuales 4 son machos adultos, 2 machos juveniles, 7 hembras adultas, 4 hembras juveniles y 4 crías sin determinar su sexo aún.
Por ello, Hernán Velásquez precisó “este es su hábitat y por ello se desplazan diariamente por esta vía, cruzando por diferentes lugares y generando encuentros con vehículos, lo que puede terminar en una bella experiencia al poder apreciarlos o en una mala, atropellando a estos ciervos que se encuentran en la categoría en peligro de extinción”.
Por ello, en estos controles, que se seguirán realizando durante el año, se hace un llamado a conducir con precaución, especialmente en este tramo, y a una velocidad baja para proteger y ayudar a que la población de huemules pueda seguir creciendo al resguardo de la labor que realizan en este parque nacional las y los guardaparques, y donde la comunidad local y aledaña participa también activamente.