Por Pedro Burgos Vásquez
Director Regional Sernatur Los Ríos

 

 

 

 

 

En algún momento de la historia y del desarrollo de los territorios turísticos aparecen sucesivamente modelos y tendencias de cómo la industria turística va abordando los cambios no solo de su propia demanda, sino también en algunos casos de cómo se mueven otros sectores productivos o simplemente los gustos de la sociedad. En ese devenir de tiempo y desarrollo han surgido conceptos como destinos turístico emergente, luego destinos turísticos maduros, otra definición los catalogaba como consolidados, en crecimiento o en desarrollo.

En el punto anterior, es preciso aclarar o mencionar que ninguna etapa es exacta, ya que los destinos, territorios y comunas en materia de turismo generan mejoramiento continuo con desafíos crecientes, que si bien permiten tener visiones de estados de desarrollo, su delimitación tanto en tiempo como en estado no es absoluta.

Las tendencias del mercado, el crecimiento de la actividad turística en Chile, el mayor desarrollo de la oferta y los crecientes números han dado cuenta que los territorios que se definen como destinos turísticos, término por cierto utilizado a diestra y siniestra, requieren sin duda una apuesta superior que hoy día podría estar dada por los destinos turísticos inteligentes. Aclarando de inmediato que esto no es el uso de las tecnologías de la información, sino un tema de mayor profundidad y alcance.

Es más, un destino turístico inteligente no nace por definición, sino que debe tener su arraigo en el desarrollo territorial inteligente que se refiere a coordinar las decisiones económicas, sociales, políticas y medioambientales antes de disponer algún programa o proyecto, teniendo también como referencias las ciudades inteligentes o smart city. Y en consecuencia a estos temas se le debe sumar temáticas como innovación, sustentabilidad, accesibilidad y tecnologías de la innovación. Por cierto, ya el año 2009 China declaró formalmente este concepto e implementó un programas al respecto, sumándose otros lugares de Europa y Asia.

La Región de Los Ríos debe avanzar en este camino. Los números actuales del turismo son positivos, existen procesos de descentralización, productos turísticos y empresarios con sellos de Calidad y Sustentabilidad, posee una estrategia de innovación y en el proceso de actualización de la Política Regional de Turismo se ha planteado que existe en este concepto una oportunidad de desarrollo.

(Fuente: Sernatur)