Mientras gran parte de los sectores de la economía nacional han podido iniciar una paulatina recuperación como resultado del desconfinamiento de la mayoría de las comunas del país, debido a la fuerte caída de contagios por Covid-19, desde la industria de los eventos señalan que por ahora la reactivación del rubro se ha visto limitada.
El motivo de este escenario es muy claro, aseguran en el rubro: los restringidos aforos que permite el Plan Paso a Paso en las fases 2, 3 y 4 para actividades con y sin interacción entre asistentes. Y para graficar el problema, en la Asociación de Eventos de Chile (Asevech), colocan un ejemplo puntual. En fase 3, el plan permite un aforo máximo de 100 personas en espacio cerrado para actividades con interacción (siempre que todos los asistentes cuenten con el pase de movilidad), fijando como criterio de funcionamiento, que haya 8 m2 de superficie útil entre asistentes.
El inconveniente de esto, argumentan en Asevech, es que la mayoría de los salones en Chile tienen una superficie de 500 m2 o menos, y según la norma, en el caso antes mencionado, para organizar un evento de 100 personas se requiere un recinto de 800 m2. “Para el sector hay una doble barrera de funcionamiento que limita la mayor demanda que se observa y que estamos en condiciones de absorber”, enfatiza Sofía Jottar, vocera y directora de la entidad gremial. “Por un lado, está la limitación del número máximo de asistentes que permite el plan, y por otro, que el criterio para definir el aforo sean los metros cuadrados de superficie y no la ventilación del local”.
Esta es la razón por la que la Asociación que representa a la industria de eventos ha insistido en medir los niveles de CO2 en este tipo de salones, para demostrar científicamente que con una adecuada ventilación, aquellos recintos son espacios seguros para funcionar, desde el punto de vista sanitario, incluso con mayores aforos a los permitidos actualmente por la autoridad.
“Hoy estamos en una situación muy compleja, porque el 6 de septiembre se acaba la Ley de Protección del Empleo, y con estas limitaciones de funcionamiento por los aforos restringidos, tenemos una demanda limitada, que afecta en gran medida a muchos trabajadores del sector, ya que esta limitación de aforos también afecta el dinamismo en la contratación de un mayor número de personas. Esta situación disminuye nuestra capacidad de generar nuevas oportunidades de trabajo”, puntualiza Sofía Jottar.
En esta línea, la representante gremial hace un llamado al Gobierno para que se amplíe el aforo permitido en el Plan Paso a Paso, estableciendo como criterio la ventilación de los centros de evento y no los metros cuadrados, de manera que podamos absorber toda la demanda que se está generando en este período de reapertura, y al mismo tiempo, crear nuevos puestos de trabajo”.
“Si el Gobierno por el momento no nos va a permitir ampliar los aforos para eventos con o sin interacción en recintos cerrados, que entonces considere ampliar las ayudas estatales para apoyar a los trabajadores del rubro, por ejemplo, extendiendo la Ley de Protección del empleo al menos hasta fin de año, y de esa forma, no se vean tan afectados por estas restricciones al funcionamiento de los salones”, señala Sofía Jottar.
La representante gremial llamó a las personas a considerar que no todos los eventos están tan restringidos en los aforos, sino que principalmente las fiestas, y destacó que existen otro tipo de ceremonias que cuentan con aforos más amplios, además de que muchos centros de eventos pueden funcionar como restaurante, teniendo el giro. “Además, es importante recordar que aquellos centros de eventos que cuentan con accesos, salidas y baños independientes pueden acceder a varios eventos de forma simultánea, limitando la interacción entre los participantes en las distintas ceremonias, y que eso está en línea con la normativa actual y contribuye a la reactivación”.