Miles de pasajeros resultaron perjudicados por el paro realizado durante el día de ayer miércoles por funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), en demanda de diversos objetivos gremiales, lo que causó la cancelación de numerosos vuelos y la demora en la salida de otros tantos, en el aeropuerto de Santiago y en terminales aéreos de todo el país.

Aeropuerto de Santiago

Miles de pasajeros resultaron perjudicados por el paro realizado durante el día de ayer miércoles por funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).

Según informó la DGAC, acorde a lo anunciado por las Asociaciones de Trabajadores Operativos y Fiscalizadores de la Dirección General de Aeronáutica Civil, los aeropuertos y aeródromos del país volverán a la normalidad, mientras se trabaja en una solución para las demandas de los funcionarios, publicó radio Biobío en su sitio web.

A través de su cuenta en X, la DGAC anunció que “de acuerdo a lo anunciado por la Asociaciones Gremiales de la DGAC, los aeropuertos y aeródromos del país, retornan a la normalidad mientras siguen avanzando las gestiones en búsqueda de una pronta solución”.

Sin embargo, según El Dínamo, dirigentes manifestaron que aún no se ha logrado acuerdo con el Gobierno y no se descarta proseguir con las movilizaciones. Los trabajadores reclaman el no pago de un bono comprometido hace más de un año por parte del Gobierno.

Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA por sus siglas en inglés), unos 350 vuelos sufrieron demoras e incluso cancelaciones, lo que, en consecuencia, pudo a afectar a unos 60 mil pasajeros en el curso del día.

RECLAMO DE FEDETUR

Mónica Zalaquett, presidenta ejecutiva de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), expresó la molestia del gremio por la movilización de los funcionarios de la DGAC.

“Es inaceptable lo que está sucediendo con esta movilización de funcionarios de la DGAC, porque se está afectando gravemente el funcionamiento del Aeropuerto de Santiago, la principal puerta de entrada y salida de Chile, y esto también está impactando la operación del resto de los terminales aéreos a lo largo del país, registrándose retrasos y reprogramación de vuelos en distintas regiones”.

Zalaquett agregó que “estas situaciones no se pueden seguir repitiendo en un país que aspira al desarrollo. Se trata de infraestructura crítica que es fundamental para la conectividad aérea y para un sector económico estratégico como es el turismo, que resulta gravemente perjudicado por estos episodios, que afectan también la imagen y reputación de Chile”.

La presidenta ejecutiva de Fedetur, sostuvo que ”es fundamental avanzar con sentido de urgencia en un cambio radical de la gobernanza y la forma como se gestionan actualmente los aeropuertos, y así contar con una institucionalidad que resuelva de manera eficiente y definitiva todos los problemas que se registran en los aeropuertos de Chile”.

RECHAZO DE ACHILA

La Asociación Chilena de Líneas Aéreas (Achila), a su vez, manifestó también su rechazo a la movilización de las asociaciones gremiales de la DGAC y, según señaló EMOL, acusó graves perjuicios.

«A las 14:00 horas de hoy (miércoles 13) las aerolíneas domésticas registraban más del 80% de afectación en sus operaciones y cuantificaban al menos 15.000 pasajeros afectados solo por efectos de cancelaciones de vuelos, sin considerar aquellos que han sufrido demoras», informó la entidad.

«No nos parece admisible que un grupo de presión genere un daño de esta proporción a la conectividad del país, paralizando en los hechos la mayoría de los vuelos, causando serias dificultades en los terminales aéreos de todo Chile y especialmente en el aeropuerto de Santiago», agregó Achila

Añadió la organización que «lo que hemos visto hoy es una paralización de facto que ha producido una grave alteración de los servicios, lo que ha perjudicado a miles de pasajeros«. «Hoy ha habido muchas personas que no han podido llegar a sus destinos, lo que es un perjuicio inmerecido», reiteró la asociación de líneas aéreas.

La gerenta general de Achila, Carolina Simonetti, señaló EMOL, llamó a que «que las autoridades adopten las medidas regulatorias para garantizar siempre, y bajo cualquier circunstancia, la plena normalidad de la conectividad aérea, que es un servicio estratégico en todos los países».

Asimismo, en radio Pauta, se informó que el paro de los 5.200 trabajadores de la DGAC ha impactado en el funcionamiento de los aeropuertos de Chile, ya que como explicó Manuel Valencia, subgerente de Asuntos Corporativos de Nuevo Pudahuel “ellos tienen a cargo la seguridad y la torre de control”.

En Ciudad Pauta, Manuel Valencia, indicó que el paro de actividades “ha tenido un impacto muy importante en la operación con más de 46 vuelos cancelados lo que ha provocado enojo en las personas y con bastante razón”.

Valencia explicó que “desde las ocho y media de la mañana cuando empezó el plazo que ellos definieron para la movilización, hay cerca de 80 vuelos afectados, es decir con retrasos y con algún tipo de alteración; dentro de estos 80 vuelos, hay 46 que ya han sido cancelados durante el día”.

LLAMADO DE IATA

La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA por sus siglas en inglés), en tanto, hizo un llamado al Gobierno a que, por medio de su ministerios de Defensa y Hacienda, «tome las medidas inmediatas y necesarias que permitan poner fin a las movilizaciones que iniciaron hoy -y de manera indefinida- más de una decena de sindicatos de la DGAC en todos los aeropuertos de Chile, que estaría impactando, con demoras e incluso cancelaciones y solo durante esta jornada, unos 350 vuelos y en consecuencia, pudiendo llegar a afectar a unos 60 mil pasajeros al término del día«.

La declaración de IATA, según informó EMOL, agrega que «la ralentización de los procesos aumentó de manera considerable los tiempos de separación entre vuelos, provocando demoras de en promedio tres horas, de los cuales 60 por ciento son pasajeros de vuelos nacionales y el 40 por ciento restante de internacionales».

El vicepresidente regional de IATA, Peter Cerdá, subrayó que «ante estas disrupciones, que son ajenas a la responsabilidad de las aerolíneas, a fin de evitar que más pasajeros, el turismo y el comercio del país continúen siendo afectados por acciones que atentan contra el normal desenvolvimiento de las operaciones aéreas, esperamos que este conflicto se resuelva lo antes posible».

Agregó que «la aviación es un medio de transporte esencial para la movilidad de las personas, la conectividad y el desarrollo social y económico de Chile y medidas de fuerza como estas tienen un incalculable efecto negativo en las personas y en el país».