Nuevamente el uso de cámaras trampa en la Reserva Nacional Ñuble entrega buenas noticias respecto a la recuperación de la población de huemules en la Región del Biobío. Y es que durante los meses de junio y octubre del 2017 operaron diez dispositivos instalados en los cerros El Sol y Las Mariposas, en la cara norte hacia el río Polcura, los que arrojaron imágenes de distintas especies de fauna, y principalmente de huemules.
El jefe provincial de CONAF Ñuble, Francisco Castillo, explicó que desde el año 2012 se ha trabajado con este sistema de cámaras ocultas entre los árboles y arbustos en la Reserva Nacional. Y en el año 2015, y con motivo del incendio forestal que afectó a la unidad en el mes de febrero, las cámaras fotografiaron un ejemplar en el cerro Las Mariposas, donde no se tenía registro.
Explicó que, las cámaras se utilizaron con la idea de monitorear la fauna posterior al incendio de modo de ver si había sido afectada o no. Gracias a estas cámaras se pudo obtener el registro de un huemul solitario, lo que hizo pensar que la estrategia de control del incendio fue efectiva, pues se enfocó en concentrar los esfuerzos en que éste no se propagara a sectores que claramente se conocían eran ocupados por el huemul, por lo que el área afectada por el incendio, aunque extensa, no había dañado significativamente el hábitat de la especie. “Monitoreamos con este mismo sistema en verano de 2017 logrando fotografiar a un grupo familiar, en dos de las cámaras que se instalaron, por lo tanto, hablamos de un grupo que vive allí”, precisó Castillo.
El monitoreo se repitió en invierno de 2017, para saber si este grupo permanece allí, con un tiempo total de trabajo de 134 días, traducidas en 3.216 horas, captando un total de 125 imágenes de fauna. Dentro de las especies que se registraron esta vez, de acuerdo a lo indicado por el jefe provincial de CONAF Ñuble, “se observan huemules, aves, zorros, liebres y un gato colocolo. Siendo la liebre la especie más registrada. En las aves se destacan chincoles y un zorzal. Lo que confirma la presencia de huemules en forma permanente en este sector y lo más relevante, considerando que tuvimos la fortuna de captar dos imágenes el mismo día y hora, en cámaras distintas, alejadas a tres kilómetros una de otra, podemos estimar con cierta seguridad que se trataría de grupos distintos entre un cerro y el otro”.
Luego de casi cuatro meses de permanecer las cámaras en El Sol y Las Mariposas, los profesionales del Departamento de Áreas Silvestres, liderados por la encargada de Biodiversidad de CONAF Biobío, Ana Hinojosa, revisaron las imágenes, las clasificaron y estudiaron la fauna registrada para establecer patrones de comportamiento.
“Este monitoreo, por más de un año, en este mismo sector y en otros aledaños, nos permite determinar la evolución de los grupos, cómo se van moviendo, dispersando, y cómo también van recolonizando sitios; zonas que son relevantes, porque en esos lugares teníamos registros previos y que los mismos guardaparques conocían, pero que luego fueron abandonados por distintos motivos y que ahora podemos confirmar que están colonizando nuevamente estos sectores. Es relevante continuar con este monitoreo, ya que también nos va determinando nuevos sitios para prospectar, de modo de tener un mapa completo de la Reserva Nacional y de los lugares donde esta especie se ubica, así como el número de familias que tenemos en la unidad”, destacó la profesional.
Fuente: Indap